¿Cómo se fabrican los plásticos?

Hoy en día la demanda de productos plásticos exige calidad y funcionalidad. Cualidades imprescindibles para la protección del planeta y la economía circular. Te contamos en qué consiste el complejo proceso de fabricación de plásticos.

El plástico comenzó a fabricarse en la década de los 50, desde entonces se han producido cerca de 8.3 mil millones de toneladas de este material. Actualmente, cada año se supera la producción inicial en un 900%.

A pesar de haber ido aumentando su rechazo en los últimos años, se trata de un material de gran utilidad cuyo consumo puede ser compatible con la economía sostenible. Estas son algunas cuestiones referentes a la fabricación del plástico.

Obtención de materiales plásticos.

El plástico es un material elaborado a partir de materiales orgánicos, sintéticos o semi-sintéticos. Se componen de elementos como carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno, cloro o azufre. Cada molécula de un fragmento de plástico contiene miles de átomos unidos que le otorgan una gran masa molecular.

Según los componentes utilizados, este material tendrá la capacidad de moldearse y convertirse en un elemento sólido. Se consiguen así objetos de muy diversas formas lo que permite múltiples aplicaciones.

Los compuestos empleados para producir plástico se llaman polímeros. y pueden ser naturales o de origen sintético:

Entre los de origen natural, el almidón, la celulosa y polihidroxialcanoatos generados por microorganismos, son los más utilizados.
La mayoría de los plásticos que usamos tienen origen sintético a partir del petróleo. Son sencillos de fabricar y los procesos suponen un bajo coste. Es el sector petroquímico el que se encarga de fabricar polímeros para la producción de plásticos.

La polimerización.

La síntesis de polímeros es el primer paso de la fabricación del plástico. Se dan dos métodos básicos de polimerización: reacciones por condensación y por adición. Pueden desarrollarse de varias formas:

Cuando se realiza la polimerización en masa se utiliza un monómero, en fase gaseosa o líquida, algunas también se hacen en estado sólido. Por medio de la polimerización en disolución se produce una emulsión que después se coagula.
Polimerización por interfase, los monómeros se disuelven en dos líquidos no miscibles, es en la interfase de los dos líquidos donde se produce la polimerización.

Aditivos.

Son componentes que permiten obtener las propiedades deseadas. Un ejemplo lo encontramos en los estabilizadores que protegen el material de agentes externos. Otros como los plastificantes otorgan flexibilidad al polímero, y los pigmentos añaden color a los plásticos.

Algunas espumas plásticas (plástico y gas) se utilizan también como aditivos proporcionando objetos de gran tamaño pero muy lígeros.

Moldeado.

La forma y el acabado del material plástico dependen del tiempo, la temperatura y la deformación. Se trata de procesos cíclicos, contínuos y semicontinuos.

Es muy común el uso de una máquina de extrusión que bombea plástico por medio de un molde con la forma establecida. Lleva a cabo también procesos como el moldeo por inyección y por soplado. Estos son los tipos de moldeos que pueden encontrarse:

Por compresión: El material plástico toma la forma deseada por presión.
Por transferencia: El plástico fundido se introduce a presión en un molde por medio de un pistón.
El calandrado: Forma láminas de plástico. Se utiliza en materiales que resisten altas temperaturas, y necesitan procesos de producción especiales.

Existen diversos tipos de plásticos y pueden agruparse en dos grupos:

Los termoplaśticos, sensibles ala temperatura (con el calor se ablandan y con el frio se endurecen) como Policarbonato (PC), Polietileno (PE), Polietileno tereftalato (PET) o el
Policloruro de vinilo (PVC).
Los termoestales, cuando se moldean ya no pueden ablandarse, como el Epóxido (EP)
Fenol-formaldehído (PF), Poliuretano (PUR), o las Resinas de poliéster insaturado (UP).

El futuro del plástico en un mundo sostenible.

Los fabricantes de polímeros defienden este material como esencial para cerrar el círculo, captando C02 y disminuyendo la cantidad de residuos. El sector quiere conseguir un material que no sólo respete el medio ambiente sino que forme parte de la solución. Por ese motivo el futuro del plástico pasa por la economía circular.

Ante un material con tantas ventajas el reto de la industria se encuentra en la gestión apropiada de residuos. Aunque el plástico tiende a ser demonizado, al contrario de lo que se piensa hay algunos materiales que se consideran más sostenibles y sin embargo no lo son.

Un ejemplo de ello lo encontramos en el cristal, metal, madera y papel que necesitan mucha energía para su reciclaje. En este contexto la fabricación y gestión de residuos de material plástico se considera clave para proteger el medio ambiente y avanzar hacia un futuro más sostenible.